COMBATE EN SERIO Federico Escobar Álvarez

Los medios de comunicación dentro y fuera del país informan del incremento del narcotráfico en Bolivia, lo que lleva a sacar conclusiones y tomar conciencia del aumento de la producción de cocaína y su tráfico, aún más, cuando leemos sobre la droga incautada por la Fuerza de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), son datos preocupantes. Cuando el Cardenal Terrazas se refiere a este tema lo hace basado en dicha información y con la autoridad moral que acompaña al guía espiritual de una mayoría de bolivianos. Nadie debe molestarse cuando se refiere al tema, como lo haría cualquier ciudadano intranquilo por esa lacra social, menos “pedir pruebas por las acusaciones”, todos conocemos del incremento de esa actividad ilícita. Pareciera que algunas autoridades del Gobierno se sienten “ofendidas” por las palabras del Cardenal, tal vez porque la conciencia les inquieta al saber de lo que habla.
Todo católico, por su Bautismo, participa de la realeza, sacerdocio y profecía de Jesucristo, fundador de la Iglesia, Participar de la acción profética implica anunciar la Buena Noticia o Evangelio y denunciar las injusticias especialmente de aquellas estructuras que oprimen y empobrecen a los humanos. Esas estructuras donde se encuentran ciertos gobernantes permisivos, sea por omisión o desconocimiento, de la fabricación de cocaína y su tráfico, convirtiéndose en cómplices por negligencia. Todo cristiano debe denunciar cualquier injusticia. Además sabemos que el principal elemento, para la fabricación de esa droga es la coca (para algunos sagrada pero no respetada) que se produce mayormente en nuestro trópico, que va en aumento por la demanda de los fabricantes ilegales. No podemos hacernos los desentendidos con esa realidad, especialmente importunando con declaraciones fuera de contexto a la Cabeza Visible de la Iglesia Católica en Bolivia.
Si el Gobierno es coherente con su discurso tiene que resistir la producción irracional del arbusto de coca, combatir en serio a los fabricantes y traficantes de cocaína. Hasta la Mama Pacha está inquieta por el daño ambiental que hacen contra ella por la contaminación de sus ríos y el ambiente a causa de los químicos utilizados en esa actividad ilegal. XXX